Predators

Pronto al grupo se une Hanzo, un yakuza, e Isabelle, una francotiradora del ejército israelí, que propone buscar a más gente para intentar entender la situación.

Encontrándose con Stans, un condenado a muerte: Mombasa, un guerrillero de Sierra Leona y Edwin, un inocente doctor.

Buscando un patrón común descubren que todos son soldados o asesinos notables secuestrados de sus lugares de origen y que se les permitió conservar sus armas, siendo la única excepción Edwin, quien es una persona ordinaria.

Tras esto, ambos yautjas enfrentan a una pelea en la que el cazador asesina al cautivo y hace explotar la nave mientras despegaba.

Aprovechando la parálisis de la soldado, Edwin intenta fingir inocencia para matar a Royce, pero este lo incapacita revelando que nunca confió en él, tras lo cual lo usa como cebo para atraer al yautja.

Royce se cubre con barro y tras una ardua pelea usa una hacha de guerra para incapacitar al yautja, hasta que este lo atrapa tras reconfigurar su visor para ver los latidos de su corazón, siendo salvado por Isabelle, quien lograr herir con su rifle al extraterrestre, siendo herida en el proceso, pero Royce aprovecha esta oportunidad y logra decapitar a su oponente.