Esta operación contaba con 15 camiones al salir de Cosne.
Otros cinco, salidos de Nevers, se unieron a ellos en la zona.
La prudencia de los habitantes del pueblo desbarató estas maniobras.
Los cinco tanques quedaron averidados por falta de carburante.
Un intento para remolcarlos resultó vano y se pidieron tractores pesados a Nevers.