Aunque con anterioridad ya existían poka-yokes, no fue sino hasta su introducción en esa empresa cuando se convirtieron en una técnica común para el control de calidad.
Consecuente con tal premisa, cabían dos posibilidades u objetivos a lograr con el poka-yoke: Este sistema radica en lo sencillo y en lo simple.
El objetivo final es concretar un proceso o terminar un producto sin la posibilidad de que exista un defecto.
A esta fecha, los poka-yokes suelen consistir en: Como sistema completo, es poco común, en comparación con otras teorías de mejora continua, sobre todo en empresas occidentales.
Los sencillos métodos poka-yoke son una ventaja para todos los usuarios, pues con ellos pueden evitarse errores, incluso es posible salvar vidas.