Para los estoicos, Dios como espíritu o aliento vital que llena, legisla y dirige el Universo.
Sin embargo no alcanzaron un concepto del espíritu como algo radicalmente opuesto a la materia e inmaterial.
Retomado por Christian Wolff el término sigue indicando el conjunto de psicología y teología natural pero en el curso de los siglos siempre designa principalmente así la sola esfera psicológica así lo era para D'Alambert o, sucesivamente, para Rosmini la neumatologia concernió exclusivamente a los "espíritus creados", cómo hombres y ángeles y no Dios.
En la teología cristiana, neumatología se refiere al estudio del Espíritu Santo.
En la doctrina Cristiana popular, el Espíritu Santo es la tercera persona de Dios en la Trinidad.