Este lugar se apunta, según algunas teorías, como el hipotético emplazamiento de un supuesto anfiteatro o un gimnasio de la época romana,[1] aunque las últimas excavaciones (2019-2020) han descartado esta suposición.
[3] Garci Fernández Manrique, primer corregidor de Málaga, instaló un mesón en el lugar para albergar a los musulmanes, que tenían prohibido pernoctar en el interior de la muralla.
Una vez conquistada Granada y terminado el peligro, este establecimiento se convirtió en un hospital advocado a Santa Ana.
En este siglo se convirtió en un lugar de esparcimiento para los burgueses.
En cuanto a esos compañeros del General Torrijos están enterrados exactamente donde se ve una pequeña cripta, uno de los compañeros en concreto el irlandés Robert Boyd está enterrado en el cementerio inglés.
[8] Una vez alcanzados los 5,5 metros de profundidad, se ha decidido realizar un sondeo geoarqueológico, que permitirá vislumbrar si existen restos a más profundidad sin dañar los ya hallados.