El plan Madagascar fue una propuesta del gobierno alemán nazi para reubicar por la fuerza a la población judía de Europa en la isla de Madagascar (África).
La idea de reasentar a los judíos polacos en Madagascar, que entonces formaba parte del Imperio francés, fue investigada por el gobierno polaco en 1937,[1][2] pero el grupo de trabajo enviado para evaluar el potencial de la isla determinó que sólo se podrían alojar entre 5.000 y 7.000 familias, o incluso tan sólo 500 según algunas estimaciones.
[3] El plan no fue viable debido al bloqueo naval británico.
[3] La discriminación y los ataques violentos contra los judíos comenzaron inmediatamente después de que Hitler tomara el poder en 1933.
Las tierras estériles e improductivas se consideraban destinos apropiados, ya que esto impediría que los deportados prosperaran en su nueva ubicación.