El PENIA está dirigido a las personas menores de 18 años que, como se estipula tanto en la Constitución Española como en la Convención, son las consideradas como menores de edad.
Específicamente, se refiere a la coordinación efectiva entre organismos público nacionales, regionales y locales en la aplicación de las políticas.
[4] Algunos aspectos clave del segundo PENIA son: Entre las críticas a este II Plan, se ha mencionado la falta de un enfoque que proteja a niñas y niños, y sus familias, del impacto de la crisis en España, ya que el contexto económico y presupuestario condiciona el éxito de este plan.
Además, se piensa que la estimación presupuestaria es limitada e inexacta, dado que su puesta en práctica se condiciona al cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera.
[9][10] De hecho, incluso se ha llegado a denunciar que la dotación económica para el II PENIA es inferior a la cuantía de los recortes hechos anteriormente en infancia.