Pithecophaga jefferyi
[3] Fue descubierta para la ciencia en una fecha tan tardía como es 1896 porque rara vez sale de la masa boscosa.En un principio se la llamó el Águila come-monos, debido a informes de los nativos del lugar, que aseguraban que se alimentaba sólo de monos (de ahí su nombre científico, del griego phitecus (mono) y phagus (comedor)).Nada comparable al número actual, que puede rondar los 370 ejemplares repartidos únicamente por las islas de Mindanao, donde habitan unos 300 ejemplares, y Luzón, en la que están casi extintas.Su longevidad es de 30 a 60 años, y más en los animales que se tienen en cautiverio.Durante 14 años los esfuerzos para criarlas en cautividad fueron infructuosos ya que no se tenía el equipo o los conocimientos adecuados.