Piloña

Piloña se encuentra envuelta por un conjunto de cordilleras, montañas, picos, etc., estando su cota mínima en el río Piloña en la frontera con Parres con 63 metros y su máxima elevación en el Pico Vízcares con 1420 metros.

La mayor parte del terreno está sumida en una depresión de edad terciaria en dirección este-oeste y recorrida por el río Piloña.

Gracias a los estudios geológicos en la región se vio que diferentes fajas provenientes de Caso formaban una curva semielíptica en el concejo, viendo como en la zona centro predominaba la arenisca gris, así como caliza y otros elementos.

Son conocidos buenos bancos de carbón en La Marea, habiendo otros menores en Sotiello y Borines.

La atmósfera se encuentra muchas veces saturada de vapor acuoso, ayudando a este fenómeno los frecuentes vientos del norte y noroeste que sacuden la región.

Piloña presenta un paisaje muy antropizado formado por prados para ganadería extensiva cercados por distintas variedades de árboles como robles, fresnos, nogales y laureles.

Este sector ha sido el único que ha crecido en los últimos años, aunque no en una gran proporción, debido en gran parte a que muchas funciones de carácter comarcal han sido asumidas por Arriondas, capital del concejo de Parres.

La mayor parte de las licencias comerciales se concentran en Infiesto, capital municipal.

Se puede afirmar que el territorio Piloñes ya fue poblado en la época prehistórica paleolítica gracias a los hallazgos descubiertos en las cuevas de Aviau, Espinareu, Coñareu, la Peña Ferrán, la Peña Sorribes en Sevares y La cueva del Sidrón en Vallobal, donde son de gran importancia las figuras allí halladas.

Estudios realizados posteriormente nos muestran una importante ocupación megalítica extendiéndose por todo el concejo estos vestigios históricos, siendo los más destacados los encontrados en el Monte Cayón, donde fue encontrado un monte tumular, actualmente destruido.

De la época romana se conservan dos estelas en el concejo, una en Villamayor referida al pueblo Viroménico, y otra en las inmediaciones de la iglesia Borines y que se refiere al Ablaidico.

Recientemente, se ha propuesto una reocupación en época romana del castro de El Picu Viyao, quizá con un sentido militar.

Todos estos cotos fueron agregados de manera definitiva al concejo en el año 1827.

Las primeras escuelas públicas que se abrieron fueron las de Infiesto en 1785, no llegando a los demás pueblos del concejo hasta un siglo después.

La entrada del siglo XIX trae consigo la guerra de la Independencia, notándose en todo el territorio.

La revolución del 34 y la Guerra Civil dejan en el concejo cruentos combates, perteneciendo al bando republicano derrotado en 1937 y que en su retirada volaron el puente de Infiesto.

Es el núcleo más poblado del territorio aunque en estos últimos tiempos ha sufrido un descenso debido a la emigración.

Importante también es el festival de la avellana que se celebra aquí, que fomenta el cultivo de dicho fruto así como su utilización en la repostería tradicional y moderna.

La estructura actual nos presenta una sola nave, con cabecera cuadrada y rodeada por un pórtico.

Respecto a la arquitectura popular, Piloña se caracteriza por la abundancia de casonas y caseríos.

Otra edificación moderna son las escuelas municipales, edificadas en 1910, estructurado en una sola nave con forma de “T”.

Ayuntamiento de Piloña
Santuario de la Virgen de la Cueva
Torreón de Lodeña
Casa de Indianos Villa Joaquina
San Antonio de Padua, Infiesto
Fiesta del Asturcón