Las carpas doradas empezaron a domesticarse hace más de mil años en el Imperio Chino, donde se criaban en estanques.
Los primeros en criar y reproducir estos hermosos peces fueron los chinos hace más de mil años.
Fue en el siglo XII en Japón y las regiones orientales de Asia cuando se desarrolló una cría más selectiva, dando origen a las variedades que vemos hoy en día: carpas doradas de diferentes colores, ojos, aletas, y forma del cuerpo.
Fueron precisamente los japoneses quienes desarrollaron otras variedades que incluyen al Shubunkin, Ryukin, Demekin, Tosakin, Jikin, Wakin y Hamanishiki.
En el siglo XVIII se fortalecen los lazos comerciales entre Inglaterra, Portugal, Países Bajos y Francia.
* Color rojo o rojo y blanco[1] Telescopio Oranda Durante la época de reproducción, que ocurre durante la parte final de la primavera e inicio del verano, se distinguen con mayor facilidad las diferencias entre géneros.
Es en la madrugada cuando se da por lo general la reproducción, repitiéndose a lo largo del día durante varios días más.
A los 2-3 días de ser fertilizados, se pueden apreciar los ojos y el corazón latente dentro del huevecillo.
Un mes después de nacido el alevín, empieza a adquirir la apariencia del goldfish.