El peritoneo es la membrana serosa que reviste el interior de la cavidad abdominal.El espacio entre ambas capas se denomina cavidad peritoneal y contiene una pequeña cantidad de fluido lubricante (alrededor de 50 ml) que permite a ambas capas deslizarse entre sí.[1] La cavidad peritoneal se divide en dos partes, la cavidad principal y la transcavidad de los epiplones que es más pequeña y se sitúa detrás del estómago y el epiplón mayor, ambas cavidades tienen una comunicación virtual denominada hiato de Winslow.Los órganos intraperitoneales como el intestino delgado tienen cierto grado de movilidad, mientras que en los retroperitoneales la posición es fija.Esta solución se deja dentro del peritoneo durante un tiempo considerable para que absorba las sustancias de desecho, y posteriormente es expulsada a través del mismo catéter desde la cavidad peritoneal hacia la parte abdominal externa.
Imagen lateral de la pelvis en la que es visible el fondo de saco de Douglas o recto-uterino (excavatio recto-uterina).
En la imagen puede observarse el
mesenterio
que une el intestino delgado a la pared abdominal.
Disposición vertical del abdomen en la que es visible el mesenterio.