Nos descubre además que hay en la Biblioteca Nacional un manuscrito con su traducción en verso y comentario erudito del De consolatione Philosophia de Boecio; sin embargo, no sabía que también había traducido de Mateo Boyardo, Varias poesías (Madrid, 1591).
Menéndez Pelayo cree incluso que la burla de la erudición que contiene el prólogo al Quijote de 1605 alude en concreto a este comentario.
Marcelino Menéndez Pelayo no lo desmiente: «Es generalmente fiel y ajustada al texto de Ovidio, salvo tal cual descuido en la inteligencia del sentido.
Entendía Viana al poeta de Sulmona, cuyo espíritu en parte reproduce y en parte no menor deslíe y echa a perder con excesivas amplificaciones.
No la creo inferior a la italiana de Anguillara, harto celebrada en otros tiempos y hoy muy decaída de su antigua estimación.