Nació en una familia de muy alta hidalguía y extenso patrimonio.
El acervo patrimonial heredado por nuestro personaje de sus antepasados hay que considerarlo como muy valioso.
Y, sobre todo, la nominada Casa do Pazo en Curtis, mansión que fue definida por Martínez-Barbeito como «no muy grande, ni muy esbelta, y alzada con inequívoco aire señorial».
En 1788 se hizo cargo de una canonjía en el Cabildo compostelano y dejó la Universidad.
Uno de sus proyectos más importantes fue hacer navegable el río Miño, para que los barcos pudieran transportar vino y otras mercancías desde Orense hasta el Océano Atlántico .