Escogió una cueva de las colinas cercanas al río Dniéper, en el monte Bérestove.
Los príncipes de Kiev apoyaron generosamente el monasterio otorgando la tierra a los monjes, donando dinero y construyendo iglesias.
Un incendio causó grandes desperfectos en 1718, el archivo y la imprenta fueron totalmente destruidos, diez años duró la reconstrucción.
A finales del siglo XVIII, se inició un periodo de creciente rusificación en Kiev.
En la Segunda Guerra Mundial, el complejo fue seriamente dañado tanto por las tropas nazis que invadieron, como por las soviéticas en la retirada alemana.
La Iglesia de la Asunción fue minada y destruida completamente, desapareciendo con ella todos sus tesoros.
De este periodo hasta 1961, se dejó a los monjes trabajar nuevamente en el monasterio y continuar con sus actividades religiosas, pero sin hacer propaganda ni proselitismo.
En 1961, se volvió a prohibir toda actividad religiosa en el complejo y los monjes fueron expulsados.
[9][10][11] Las cuevas en las que vivieron antiguamente los monjes en la (algunas datan del periodo Neolítico) han dado el nombre al conjunto monástico.