El origen del paso de la Cisa se remonta al siglo VII durante el reino lombardo en la península itálica y cuando ésta se disputaba por bizantinos y lombardos.
[1] Además de su función militar, este camino era recorrido habitualmente por mercaderes y peregrinos que se dirigían a Roma.
Los francos pasaron a controlar esta vía tras la conquista por Carlomagno del reino lombardo en el año 774, y su importancia aumentó notablemente.
Al igual que en la Edad Media existía un hospital para peregrinos cerca del paso.
En dirección a Berceto se encuentra un albergue que es utilizado en la actualidad por éstos, así como por excursionistas.