Los italianos controlaron gran parte del encuentro; sin embargo, en el minuto 90 el defensa Karl-Heinz Schnellinger marcó el empate para Alemania Federal.
", debido a que el futbolista no sólo defendía los colores del equipo germano, sino que también había jugado con gran éxito en varios clubes de la Serie A italiana como Mantova, Roma y Milan (en este último militaba al momento del cotejo mundialista).
A falta de cambios (ambos seleccionados habían realizado ya sus dos respectivas sustituciones), Franz Beckenbauer dejó una imagen impactante para la historia de las Copas del Mundo, jugando con el brazo dislocado, totalmente pegado al cuerpo con vendas demostrando su compromiso con la «Nationalmannschaft».
[5] En el alargue, los alemanes se pusieron al frente gracias a una anotación de Gerd Müller en el minuto 94.
Sin embargo, Gianni Rivera marcó el tanto decisivo para los italianos apenas un minuto después, al conectar un cruce bien hecho por Boninsegna.