El movimiento socialista domina la escena política belga desde mediados del siglo XX.
La igualdad implica que cada persona pueda, justamente, implicarse en las decisiones de la sociedad, y decidir sobre su propia vida, dejando de lado las condiciones sociales y familiares donde vive.
Para los socialistas, todo poder debe fundarse sobre la comunidad de personas que constituyen la sociedad.
La democracia tiene siempre el derecho de trazar el cuadro económico, y limitar al mercado.
Actualmente cuenta con 139 partidos y organizaciones políticas de todos los continentes.
El Partido Socialista trabaja cotidianamente con organizaciones que tiene objetivos comunes a los suyos.