El parque está cruzado por cinco viaductos y por la Avenida do Estado manteniendo sólo la mitad del área verde que originalmente tenía en su inauguración.
[2] El área próxima al terminal de omnibuses tiene bastante movimiento y cuenta con una relativa presencia policial.
[7] El año anterior ya se había bautizado al área con el nombre del segundo emperador brasileño.
[9] El parque sería expropiado en noviembre de 1968 para dar lugar a los viaductos que hoy cruzan la zona.
La terminal de omnibuses, inaugurada en 1971, y la estación Pedro II del metro, que comenzaría a ser construida pocos años después, hicieron que el parque perdiera más áreas verdes.
[7] Entre todos los cambios que el parque sufrió en la segunda mitad del siglo XX, sólo el sistema vial fue privilegiado.