Hace unos 20 millones de años, durante el período Mioceno, La Tierra estaba cambiando drásticamente: grandes planicies se desarrollaban, surgían grandes sistemas montañosos y se reducían los bosques y pantanos.
Parahippus era mayor que Miohippus, con pata y rostro más alargados.
Los huesos de las patas estaban fusionados y esto, junto con su musculatura, le permitía a Parahippus moverse con zancadas hacia adelante y atrás.
Los dedos laterales eran casi vestigiales, y apenas si tocaban el suelo.
Las crestas extra en los molares que eran variables en Miohippus se volvieron permanentes en Parahippus.