El edificio fue remodelado como Parador de Turismo en 1966 por el arquitecto Jesús Valverde,[2] y continúa realizando funciones hosteleras desde entonces.
A finales del siglo XVI el viajero Antón Van den Wyngaerde (conocido como Antonio de las Viñas) menciona en su estancia en Zamora, la nobleza del edificio.
[6] Fue remodelado como Parador de Turismo en 1967, realizando importantes modificaciones a su estructura y organización con el objeto de convertirlo en un hotel.
[2] El patio interior posee una mezcla de estilos que va entre el renacimiento y el gótico, reconstruido en el siglo XVI.
Cuenta con dos salas de convenciones y una piscina en el jardín exterior.