[2] El origen del nombre cynocephalus (del griego antiguo κυνοκἐφαλος ), cuya aplicación se atribuye a Aristóteles, significa literalmente «cabeza de can», y alude a su hocico ancho y grande, vagamente parecido al de un perro.
La morfología general es esbelta, con las extremidades superiores más largas que las inferiores, y una cola de longitud equivalente al cuerpo.
La especie vive en grupos variables de cinco a dosciento cincuenta ejemplares, organizados según un complejo modelo jerárquico.
Sus hábitos son tanto terrícolas como arborícolas: transcurren la mayor parte del día sobre el terreno, pero al llegar la noche se retiran a las ramas de los árboles.
Sus principales predadores son el hombre y el leopardo, temible por su capacidad de trepar los mismos árboles donde se refugian.
En Kenia, por el contrario, P. c. ibeanus se superpone con el Papio anubis dando lugar a híbridos que muestran diversos fenotipos inusuales.