El papel sellado o timbrado es un tipo especial de papel que contiene un impuesto de timbre, y que es exigido, en ciertos países, para efectuar trámites judiciales o administrativos.
Su importancia para la consolidación de la moderna burocracia, así como para la historia administrativa y financiera resulta fundamental.
Cinco años después Colbert introdujo en Francia un sistema similar.
El papel timbrado ha sido ampliamente utilizado en todo el mundo para recaudar impuestos sobre documentos como arrendamientos, acuerdos, recibos, testamentos y muchos otros.
Los papeles se compran en blanco aparte del sello preimprimido y están disponibles en oficinas de abogados, oficinas de correos y tribunales de acuerdo con las regulaciones locales.