Una vez armada, la ojiva detonará al impactar el blanco, o cuando se apague el motor del cohete.
Esto evita problemas futuros, al no dejar munición sin explotar en los campos de batalla.
La principal desventaja del Panzerfaust 3 es que solo tiene un disparo y los soldados deben acercarse mucho para atacar blancos.
La última versión del Panzerfaust 3, el PzF 3-IT-600, puede alcanzar hasta 600 m gracias a su avanzada mira asistida por computadora.
Hacia 2005, había dos modelos adicionales en etapa de desarrollo o prueba, ambos basándose en cohetes con ojivas más pequeñas y ligeras.
Versión antitanque mejorada, con cohetes de carga hueca en tándem (diseñados para penetrar blindaje reactivo).