Palacio de los duques de Villahermosa (Pedrola)

A finales del siglo XVIII y los inicios del siglo XIX se lleva a cabo un importante reforma para modernizarlo y transformarlo al gusto neoclásico de la época.

Ambos edificios están comunicados por un largo y tortuoso corredor construido por Luisa de Borja, bajo el cual se construyeron casas, y donde la duquesa dispuso un Vía Crucis según lo que se suponía era la distancia recorrida por Cristo en Jerusalén.

La casa de Villahermosa mantuvo el patronazgo sobre el templo hasta 1973.

A lo que se conservaba tradicionalmente en Pedrola, se unieron cuadros, muebles y tapices del antiguo palacio de Villahermosa en Madrid, ocupado por el Museo Thyssen-Bornemisza.

El palacio fue cuidadosamente restaurado por Pilar Azlor de Aragón y sus hijos.

Vista del palacio