Después de que un UAV del SGC se estrelle con una extraña planta grande alienígena, el SG-1 debe viajar allí para recuperarlo.
Incluso, los mismos miembros del SG-1 empiezan a sentirse mal; actúan algo irritados.
Esto provocó la irritabilidad en el SG-1 y que los habitantes cayeran enfermos.
Pronto, Carter instala un sistema especial de sonido para curar a los nativos, así como para conseguir que las plantas cambien la frecuencia de su sonido a la forma correcta otra vez.
Finalmente, el equipo observa desde lo lejos como la naturaleza en aquel mundo, se recupera satisfactoriamente.