Desde los años 1990 estudios arqueológicos han permitido un mayor conocimiento del contexto y realidad de la ciudad.
[1] Los geógrafos clásicos Plinio, Claudio Ptolomeo y Estrabón[2][3] ya citaban la ciudad vascona de Oiasso.
[4] Ptolomeo, posteriormente en el siglo II ya en la época imperial, indicó dos ubicaciones para Oiassó en el capítulo 6, 10 de su libro II Geographikè Úphégesis: una para la ciudad (en en griego antiguo: Οίασσώ πόλις) y otra para el 'promontorio de Oiassó del Pirineo' (Οίασσώ άκρον Πυρήνης).
[2] Esta calzada atravesaba el valle del Ebro pasando por Osca e Ilerda.
Por Oiasso también cruzaba la XXXIV calzada que unía Asturica Augusta con Burdigala, tal como relata Estrabón.
La etimología del nombre del río Bidasoa hace referencia a determinar la ubicación de Oiasso; bidasoa está compuesto por los términos bide, que en euskera significa 'camino', aso, en referencia a 'easo', corrupción de Oiasso, y a, reducción del subfijo 'ra' que significa 'hacia', lo que sería 'el camino hacia Oiasso'.
Se han encontrado almacenes, talleres y termas que configuran una extensión de 12 ha.