En esta parte fronteriza del llamado muro sureste, las líneas defensivas alemanas A y B se desmoronaron en un tiempo relativamente breve.
Hay indicios claros de que Stalin favoreció al mariscal Fiódor Tolbujin como previsible "vencedor de Viena'" frente a Rodión Malinovski, también mariscal de la Unión Soviética y más capaz comandante del Segundo Frente Ucraniano, ya que consideraba a este último como un potencial competidor político especialmente poderoso.
Los distritos vieneses situados en la margen izquierda del Danubio (hoy en día Floridsdorf y Donaustadt) sufrieron también la retirada de las tropas SS hacia Viena.
La procedente del oeste, tras cruzar la Westbahnlinie (línea férrea electrificada que comunicaba Viena con el oeste del país) y seguir hacia el norte hasta la altura de Gersthof, se presentó en los distritos interiores el 7 de abril.
Ese mismo día, la 2.ª División Acorazada SS procedente de Mauer, llegó por Mariahilfer Straße para reforzar a los defensores del centro.
El objetivo táctico pudo haber sido ganar tiempo para que una nueva formación procedente del frente occidental hiciera posible la retirada al Alpenfestung o fortaleza alpina,[6] o bien la última esperanza de Hitler, nacida al abrigo de las condiciones que más adelante darían lugar a la Guerra Fría, consistente en llegar a un acuerdo con las potencias occidentales que concediese a los alemanes el estatus de aliados en una nueva guerra contra los comunistas.
La resistencia formada por comunistas, grupos conservadores cristianos e incluso un reducido número de oficiales pertenecientes al mando del Wehrkreis XVII (17.º Distrito militar) reclutados por el mayor Carl Szokoll, intentaron minimizar los daños a la ciudad cooperando con el cuartel general del mariscal Tolbujin situado en Hochwolkersdorf.
Finalmente, hubo traiciones, la operación fue descubierta y tres oficiales involucrados en la conspiración, el mayor Karl Biedermann, el capitán Alfred Huth y el teniente Rudolf Raschke fueron colgados públicamente de las farolas de Floridsdorfer Spitz, en el distrito del mismo nombre.
Tres antiguos líderes sindicales, el socialcristiano Lois Weinberger, el socialdemócrata Johann Böhm y el comunista Gottlieb Fiala fundaron el 15 de abril la Federación Sindical Austriaca (ÖGB), no adscrita a ningún partido político.
[3] Entre las víctimas civiles figuran personalidades como Emil Stepanek, director artístico de los estudios cinematográficos Rosenhügel y la actriz Lizzi Waldmüller.