Se puede encontrar desde Nicaragua, el sur de Costa Rica hasta toda la Sudamérica tropical, las Antillas (sin Cuba ni Bahamas) y en las islas Galápagos.
Las hormigas abren al máximo las mandíbulas y quedan trabadas en esa posición gracias a un mecanismo interno.
O. bauri puede simplemente volver a trabar y morder con sus mandíbulas si una mordedura no es suficiente, o cortar trozos de sus piezas más grandes.
Las mandíbulas también permiten movimientos lentos y precisos cuando hay que desarrollar otras tareas como el cuidado de las larvas.
La fuerza máxima ejercida estaba en torno a 300 veces el peso de su cuerpo.