Algunas familias mestizas notables de Norogachi incluyen a los Villalobos, Moreno, Loya, Aguirre, Pérez, Herrera, Gardea, Molina entre otras.
La incipiente arqueología de la región revela antiguas habitaciones, del tipo circular y cuevas funerarias pertenecientes a los diversos “horizontes” descritos por Zingg (“Canasteros”, “Horizonte Transicional del Río Fuerte”) pero la exploración apenas si ha comenzado (Irigoyen 2011) Se puede decir sin embargo que la región ha sido habitada continuamente por varios miles de años.
En 1913 se libró en Norogachi una batalla entre las fuerzas huertistas y constitucionalistas, resultando derrotados estos últimos.
Al reanudarse los trabajos misionales un número importante de misioneros jesuitas han presidido las actividades de la Misión incluyendo a los padres Pichardo, Galván (reputado médico), Brambila, Moreno, Uranga, Díaz Infante, Robles, Vallejo y muchos otros.
Este centro ha sido atendido por enfermeras religiosas entrenadas en Austria (SM Elise Andris, SM Rosalía Mendoza) y doctores americanos (Hardy Carlton, William Lohr, Chuck Cullen y otros) que volaban desde Texas, Oregon y Nuevo México para prestar sus servicion en breves incursiones que sin embargo proporcionaron atención médica a muchos pacientes.