Nora de Izcue

Dio el salto al cine al ser contratada por él como asistente de dirección en los rodajes de La muralla verde y Espejismo.

Armando contribuyó en su formación cinematográfica y así lo expresó: El mayor reconocimiento internacional fue gracias a su cortometraje documental Runan Caycu (1976) producido por el Sistema Nacional de Apoyo a la Movilización Social.

La película narra los enfrentamientos del movimiento campesino cusqueño con los gamonales y hacendados, relatado desde la mirada de su líder campesino Saturnino Huillca.

Asimismo, evidencia el rol y la participación violenta de las Fuerzas Armadas en el enfrentamiento que precedieron a la Reforma Agraria de 1969.

[3]​ Posteriormente, Nora, con un gran interés antropológico y que poseía registros fílmicos de sesiones de curanderismo con consumo de ayahuasca decide realizar un documental denominado El viento del ayahuasca (1980), que sin embargo en el proceso empieza a convertirse en una ficción no del todo lograda en la que intentaba contrastar, evidenciar el choque cultural entre la sociedad limeña de carácter occidental y el oriente del Perú.