"No se culpe a nadie" es un cuento del escritor argentino Julio Cortázar.
La psiquis domina y protege el cuerpo, mientras la mano derecha es una extensión corporal percibida como falso yo monstruoso sobre la que ya no hay control.
Este sufre una experimentación física y psíquica totalmente extralimitada, lo que corresponde con una psicopatología esquizoide.
En el cuento, también se evidencia la necesidad de evadir las pautas morales y convenciones sociales que le ha impuesto una vida convencional.
Esto produce «una lucha mortal entre las voluntades escindidas que conviven en su interior, representadas aquí por diversas partes de su cuerpo».