Niko Pirosmani

Pronto se encontró huérfano y fue puesto bajo el cuidado de sus dos hermanas mayores.

A lo largo de su vida, la cual pasó siempre en la pobreza, se empleó en trabajos comunes que iban desde pintar casas hasta encalar fachadas.

A pesar de que sus pinturas lograron una popularidad local su relación con artistas profesionales fue difícil.

Ese mismo año se publicó un artículo sobre la obra de Niko Pirosmanashvili en el periódico georgiano Temi.

Su continua pobreza, aunados a los problemas económicos derivados de la Primera Guerra Mundial, provocaron que su vida terminara con su obra sin reconocimiento.

Tras la guerra desarrolló una reputación internacional, al ganarse la admiración como pintor naïf en París y en otros lugares.

Niko Pirosmani, Farmer with a Bull (1916), Centro M.T. Abraham