La frase nihil novi es también usada como una abreviación para la frase en latín, nihil novi sub sole (o sub sole nihil novi est), que quiere decir nada nuevo bajo el sol que apareció por primera vez en la Vulgata del s. IV, en Eclesiastés 1, 9.
Fue una victoria importante de la nobleza polaca (szlachta) sobre los reyes.
Esta ley sustituyó al privilegio de Mielnik (przywilej mielnicki, que sólo fortalecía a los más ricos) y estableció, de esta manera, un equilibrio de fuerzas a favor del Sejm (parlamento), donde la baja nobreza adquirió más poderes.
La ley fue aprobado por el rey Alejandro I Jagellón durante la sesión del Sejm en Radom el día 3 de mayo de 1505.
Ese mismo año, la szlachta continuó expandiendo sus poderes al eliminar el derecho a voto de la mayoría de las ciudades y prohibió a los campesinos dejar sus tierras sin el permiso de su señor feudal, de este modo estableciendo firmemente la servidumbre en Polonia.