Nicolás Rosell
Ingresó en el convento de Santo Domingo en 1328, donde comenzó su carrera eclesiástica en la Orden de Predicadores.Inmediatamente se le otorgó el cargo de gran Inquisidor de Aragón.El juicio de Jacobo Juste fue enteramente dirigido por Nicolás Rosell.Después medió en las disputas entre Pedro IV e Inocencio VI.A su muerte, se le enterró en Santa Catalina de Barcelona en una bella tumba obra de Pedro Moragues.