Es sus artículos, libros y conferencias desmitifica la situación de las mujeres en el mundo árabo-musulmán y denuncia el auge del fundamentalismo en todas las religiones.
[5]En 1964, Irán, junto a Francia, eran los dos únicos países del mundo que contaban con una mujer ministra.
Hasta 1978 las mujeres de Irán tenían más derechos que las españolas pero desde entonces sus derechos han ido recortándose, recuerda Armanian, especialmente crítica con la involución de Irán, país del que se exilió con apenas 20 años cuando cayó en manos de los ayatolás que reemplazaron al gobierno del Shah.
[6] Colabora en diversos medios de comunicación españoles con análisis políticos.
Mantiene una columna semanal en su blog Punto y Seguido en el diario Público.