Posee forma piriforme (aproximadamente, de "pera") y presenta sólo tres pares de apéndices cefálicos: anténulas, antenas y mandíbulas, con los que nada.
El primero siempre es unirrámeo, los otros, en general, birrámeos, y pudiendo presentar en la base enditos.
Un ocelo mediano, u ojo nauplius, y un labro que oculta la boca, completan su descripción anatómica.
Cuando es de vida libre, puede o no alimentarse, siendo habitual que pase este estado reabsorbiendo sustancias de reserva (sin alimentación activa); de hecho, en muchos casos no tiene desarrollado aún el tubo digestivo ni abierta la boca al exterior.
Al ser la larva de un crustáceo, para crecer necesitan mudar (ecdisis).