Natalio Michelizzi

En mérito de su reconocida habilidad financiera había cimentado una próspera situación económica.[1]​ Llegó en 1935 a Atlántida como turista y se sintió deslumbrado por la belleza del lugar.Allí decidió adquirir varios terrenos para construir un gran hotel que llamara Planeta.[2]​ Como era un apasionado por todo lo vinculado a la vida del mar, decidió que el hotel tuviera forma de barco.Fue el primer hotel que reunía prácticamente todas las comodidades: calefacción, baño privado y agua caliente lo cual, para la época, significaba un aporte valioso.La administración fue confiada al señor Antonio Morales, un porteño que tenía casinos en Mar del Plata.Si bien hubo un primer momento de paralización en las ventas, cuando se vendieron los últimos terrenos de los demás fraccionamientos, Michelizzi se transformó en el amo y señor, ejerciendo el monopolio, y vendiendo al precio que estimara conveniente para sus intereses.El transporte, una carreta tirada por bueyes y un humilde camioncito que funcionaba a gas de carbón.
Playa Mansa de Atlántida desde el Planeta Palace Hotel
Casa del Águila en Villa Argentina