La nacionalidad o ciudadanía saudí es el vínculo jurídico que liga a una persona física con el Reino de Arabia Saudita y que le atribuye la condición de ciudadano.
[2] Un extranjero puede solicitar la ciudadanía saudí si cumple con las siguientes condiciones:[2] El primer ministro otorga la ciudadanía, basándose en la recomendación del ministro del Interior, el cual, en todos los casos, puede negarse a conceder la nacionalidad a los extranjeros que hayan cumplido con todas las condiciones de naturalización, sin dar explicaciones.
La ciudadanía saudí puede ser revocada por un decreto basado en la solicitud del ministro del Interior, a cualquier individuo que la haya adquirido por naturalización bajo las disposiciones de los artículos 8, 9 y 10 de la ley de nacionalidad, dentro de los primeros cinco años de su adquisición en los siguientes casos:[2] La nacionalidad saudí también puede ser revocada en cualquier momento, mediante un decreto basado en la recomendación del ministro del Interior y la aprobación del Consejo de Ministros, a cualquier persona que la haya adquirido por naturalización, si se demuestra que la misma fue obtenida basándose en engaños, mentiras o falsificando testigos, documentos o información.
Sin embargo, el Gobierno puede revocar la nacionalidad a una persona que constituya una amenaza terrorista, como en el caso de Osama bin Laden.
[6] La doble ciudadanía[nota 4] solo está permitida para los saudíes nacidos en un país extranjero que permita o conceda la nacionalidad por ius soli (derecho de suelo) y para las mujeres que se casen con un ciudadano extranjero.
[7][nota 5] A los nacionales saudíes no se les permite adquirir una ciudadanía extranjera sin el permiso del primer ministro.