En física, y más concretamente, en óptica, el número de Abbe de un material transparente es una cantidad adimensional que surge al comparar el índice de refracción del material a distintas longitudes de onda.
Recibe este nombre en honor del físico alemán Ernst Abbe (1840–1905) que lo definió.
En concreto, el número de Abbe, V, de un material se define como: donde nD, nF y nC son los índices de refracción del material a las longitudes de onda correspondientes a las líneas de Fraunhofer D-, F- y C- (587.6 nm, 486.1 nm y 656.3 nm respectivamente).
Los números de Abbe se usan para clasificar vidrios y otros tipos de materiales transparentes: materiales con baja dispersión tendrán un número de Abbe grande; cuanto mayor sea el número de Abbe, mejor será la calidad de la lente.
Una buena lente suele corresponder a valores de V superiores a 40.