Myrmecophagidae

Tienen patas bien desarrolladas, pies plantígrado con robustas garras falciformes, y cola larga, prénsil en los tamanduas, de vida arborícola.

Tienen un excelente olfato, pero los sentidos de la vista y el oído están poco desarrollados.

Viven principalmente en las selvas densas tropicales, pero a veces se les encuentra en las sabanas, en general por parejas o solitarios.

En actitud defensiva se ponen en posición semierecta con las patas anteriores levantadas dispuestas para golpear con sus garras, manteniéndose apoyados con las patas posteriores y la cola que, en las especies arborícolas, permanece aferrada a una rama.

[1]​ Son mirmecófagos; la garras las usan para desenterrar las hormigas y romper los termiteros, tras lo cual captura una gran cantidad de presas con su larga lengua pegajosa.