Mya arenaria

Igual que otros moluscos bivalvos, como los mejillones y las ostras, este animal desintoxica su organismo almacenando en la concha una gran parte de los metales pesados que ha ido filtrando (especialmente el plomo).

Este molusco puede acumular muchos tóxicos, lo que la convierte en un medio interesante para evaluar la contaminación crónica de los sedimentos de la red trófica.

En su concha se conservan, incluso tras la muerte del animal, los rastros de contaminaciones en el tiempo.

Estas especies pueden acumular metales pesados y varias toxinas creadas por las bacterias y especies de plancton de las que se alimenta, especialmente en los estuarios que se hallan frecuentemente eutrofizados, distrofizados o que reciben la contaminación de los vertidos industriales.

Por esta causa, su consumo puede producir problemas digestivos como la diarrea, vómitos y urticaria.

El gran sifón de la Mya arenaria permite su alimentación mientras permanece enterrada en la arena
Mya arenaria
Mya arenaria
Mya arenaria ; La cutícula exterior desaparece rápidamente tras la muerte de la almeja dejando al descubierto las estrías de crecimiento.