Murilo Mendes

Trabajó como archivero en el Ministerio de Hacienda y como funcionario del Banco Mercantil.Más tarde desempeñó otros destacados cargos en la administración pública de su país.En 1957 se estableció en Roma, donde dio clases de literatura brasileña.Recibió el Premio Internacional de Poesía Etna-Taormina en 1972.En su primeros poemas destaca la belleza del paisaje brasileño, pero su conversión al catolicismo en 1934 imprimió un cambio en su obra, que mostró desde entonces una orientación más espiritual, con visiones sobrenaturales en una atmósfera surrealista.