Municipio Arzobispo Chacón

El municipio está enclavado dentro de la Cordillera de Mérida por lo que su relieve se ubica entre los 2000 a 3000 m s. n. m. aunque en los límites del municipio por el sur y el este, la altura disminuye por el piedemenonte andino.

La Región sur del estado estuvo habitada por diversas tribus nativas: los Guaraques, los Chacantaes, los Mucutuyes, los Mucuchachíes, los Mucuñoes, los Mucurias o Mucarios; todos ellos probablemente de la etnia tatuy, quienes se distinguían por sus avances en la agricultura, creación en cerámica y confección de "calzas" o plantas, similares a las suelas de un zapato, que les permitían viajar grandes distancias.

Los primeros pobladores de esta zona, eran colonos probablemente españoles, con un alto grado de alfabetización, y descritos (por sí mismos) "de estatura alta, piel blanca", con una fuerte convicción religiosa, causa que a la cual se atribuye la prosperidad en cada asentamiento del actual municipio durante la época pre y post-colonial.

[1]​ Canaguá y sus poblaciones cercanas se mantuvieron al margen de las campañas pro-independentistas, siendo zonas aledañas alejadas de las vías principales por las cuales se trasladaría el ejército de Simón Bolívar, durante el llamado "Cruce de los Andes" que llevaron al desligamiento entre el territorio y la Corona española; Sin embargo los efectos colaterales posteriores, tanto económicos como sociales no dejaron exenta a las poblaciones del municipio.

La economía del municipio se fundamenta en actividades relacionadas con la agricultura y en menor medida con el turismo; Los principales cultivos del territorio están dirigidos a la producción del café con cerca de 1114 TM de producción al año para 2001,[3]​ seguido por el apio y la caña con 13.600 TM, mientras que en menor medida se producen yuca, cambur, plátano, caña, papa, maíz, arveja entre otras hortalizas y frutas reuniendo en total otras 14.714 TM de producción al año.

[4]​ Se atribuye la llegada de la electricidad al habitante Don Hermes Corti Martínez.

El pueblo se ubica a una altitud de 1500 m sobre el nivel del mar.

Se caracteriza por tener una topografía bastante accidentada en función de un relieve no homogéneo en todas sus áreas, fundamentado en montañas y valles.

El Río Canaguá nace aproximadamente a los 2340 m sobre el nivel del mar, se desplaza en dirección suroeste, noroeste y sigue un fondo de valle estrecho en su mayoría, con vertientes que caen abruptamente.

Situado a 1005 m s. n. m., es una población, fundada sobre un asentamiento de nativos en el año 1656 por el forastero Pedro Varela.

En 1988 es establecido como parroquia, perteneciente al Municipio Arzobispo Chacón según la División Territorial de 1992.