Estas estructuras descentralizadas se organizan de tal manera que se asemejan al comportamiento del "slime mold" o Myxomycota un moho (hongo) que adopta una apariencia unicelular o pluricelular dependiendo de las condiciones ambientales, haciendo el paralelo, a veces una voz y es a veces muchas voces, pero siempre organizadas.
Dependiendo de como se usan estas tecnologías la información y las comunicaciones, pueden generar efectos benéficos o perjudiciales para la sociedad.
El caso opuesto sería crear una sociedad similar a la propuesta por George Orwell en su libro 1984.
Los políticos y los profesionales de la publicidad, las relaciones públicas se plantean si es posible utilizar las multitudes inteligentes para conseguir algún objetivo determinado, como puede ser el lanzamiento o la revitalización de un producto o la movilización social con fines propagandísticos.
Los ejemplos de movilizaciones ciudadanas mediadas por las tecnologías se vienen reproduciendo ya desde finales del siglo XX y han supuesto un nuevo reto para los estudios sobre masas.
[6] Actualmente, las aplicaciones que conllevan a la generación de la inteligencia colectiva ya no son conducidas solo por humanos sino también por sensores.