Con su pelo de colores chillones y sus caras sonrientes, se encontraban en todas las tiendas del país.También conocidos como «Wishniks», «Troles del tesoro», «Norfins» y otros nombres, no fue hasta 2003 cuando una ley del congreso estadounidense permitió a la familia danesa de Elvio recuperar sus derechos de autor en aquel país y convertirse de nuevo en el único fabricante oficial.Desde 2015 existe una nueva versión del Troll de Thomas Dam.GoodLuck Troll se transformó de un juguete a un objeto de decoración con un gran resultado ya que en los últimos años se ha convertido en un ícono del diseño escandinavo.El muñeco troll de Thomas Dam no ha perdido su esencia ni encanto.