Sin embargo, un estudio de The Lancet señala que la cifra ha descendido continuamente desde 526.300 en 1980 hasta 342.900 en 2008, y que en este último año el número sería de 281.500 si no se incluyen las causadas por el VIH.
Hay factores asociados a la muerte materna que no implican un buen o mal estado de salud general, como son el aborto clandestino y las muertes relacionadas con la violencia contra la mujer.
[4] En el ámbito mundial, aproximadamente un 80% de las muertes maternas se deben a causas directas.
Eso significa que unos 50 millones de partos domiciliarios no contaron con dicha asistencia.
[9] La UNFPA afirma que un importante porcentaje de muertes maternas se pueden evitar tan solo con una adecuada atención sanitaria a la madre gestante.
Japón, Dinamarca, Noruega y Países Bajos obtuvieron similares resultados implementando políticas semejantes.
Hasta ahora, la evidencia sobre el impacto generado por el acceso a los servicios de salud ha provenido de estudios con pequeñas muestras realizadas principalmente en Asia, África subsahariana y Latinoamérica.
Se requieren, sin embargo, investigaciones adicionales a gran escala, que consideren factores contextuales y evaluaciones de impacto, que posteriormente ayuden a promover y ampliar este tipo de intervenciones.
[13] El documento concluye que la para disminuir las cifras de estas muertes deben producirse tres cambios esenciales:[14]