Los registros encontrados hasta el momento, muestran que O-Sensei se entrenó en Tenjin Shin'yō-ryū jujutsu con Tozawa Tokusaburō por un corto período en 1901 en Tokio; en Gotō-ha Yagyū Shingan-ryū kenjutsu con Nakai Masakatsu desde 1903 a 1908 en Sakai, y en judo con Kiyoichi Takagi en 1911 en Tanabe.
Fue enviado a la reserva, en Osaka, pues en un principio se le consideraba demasiado pequeño de estatura para prestar servicio activo.
Logrando el grado de sargento y la medalla al valor, finalmente volvió a Japón en 1905.
[5] En 1920 fallece su padre, un líder social a quien Morihei idolatraba, y en 1922 su madre Yuki, estos acontecimientos lo sumen en la depresión, de la que solo encuentra alivio en la secta neo-sintoista Ōmoto, dirigida por el carismático reverendo Onisaburo Deguchi.
Pero las condiciones que en Mongolia se vivían por entonces, eran violentas e inestables, lo cual puso en más de una ocasión en peligro sus vidas, llegando a ser tomados como rehenes por soldados nacionalistas chinos y por bandidos, siendo liberados por las gestiones del gobierno japonés, con lo cual ambos fueron repatriados al Japón.
[6] En 1927, el ahora instructor calificado de Daito-Ryu Ueshiba se muda a Tokio, donde funda su primer dojo llamado Kobukan.
Ueshiba, muy vinculado a la secta, decidió retirarse de la vida pública y confiar la dirección del dojo donde enseñaba su método marcial, que había ido formulando durante la década de los veinte, a su hijo, Ueshiba Kishomaru.
Morihei se trasladó con su esposa a Iwama y comenzó la construcción de lo que llamaba el ubuva (habitación de nacimiento), o santuario interior del aikido: un complejo que incluía el Santuario Aiki y un dojo al aire libre.
Morei nombró a Minoru Hirai como representante y director de la Sección Aikido del Butokukai y fue cuando se empezó a utilizar por primera vez el nombre de Aikido.
En aquella ocasión, Morihei causó honda impresión en la audiencia con una demostración titulada "La esencia del Aikido".
Ueshiba enseguida caminó a su jardín, donde tuvo la siguiente revelación personal:Sentí al Universo temblar súbitamente, y que un Espíritu brotó de la Tierra, envolvió mi cuerpo, y transformó mi cuerpo en uno dorado.
Ahora eran vehículos para cultivar la Vida, el Conocimiento y la Virtud; No artes con los cuales arrojar a gente.