Sobre este último punto, el propio autor comentó en su autobiografía:[2]Siccome la statua di Pio XI e il mio bozzetto presentavano entrambi i pontefici in atto benedicente, con tre dita della mano destra aperte distese, un cardinale osservò che, quando anche il mio monumento fosse stato messo in opera, dei due successori di Pietro si sarebbe potuto dire che giocavano alla morra.
Pero no pude convencer a la comisión con el brazo en alto en actitud de juicio.
En concreto se produjo el 12 de marzo de 1964 y fue presidida por el papa Pablo VI quién impartió una alocución en que loaba la escultura, así como la propia actitud que representaba:[3]Os diremos, sencillamente, en estos momentos que Nos sentimos contento de ver cuajada en el bronce, por la pericia del escultor Messina, la majestuosa y aquí impresionante figura del Papa Pío XII.
En este podio se encuentra dispuesta en letras de bronce dorado la siguiente inscripción latina:[5]PIVS XII
(en español, A Pío XII, los cardenales por él creados)La escultura del pontífice, propiamente dicha, es de cuerpo entero y se encuentra realizada en bronce dorado.
Se representa a Pío XII en pie con una rica capa pluvial, llevando mitra y gafas.
La actitud del pontífice es la de bendecir con la mano derecha, mientras avanza girando su cabeza hacia ese lado.