Este delta frondoso es propenso a inundaciones y sobre todo cultivar el desierto.
It se relaciona con que el profeta Salomón subió esta montaña y miró hacia la tierra del sur de Asia, que fue cubierto con la oscuridad, pero se dio la vuelta sin caer en esta nueva frontera, y dejó solo la montaña que lleva su nombre (de Ibn Battuta).
De acuerdo con el folklore local, el profeta Salomón, mediante el ejercicio de su poder milagroso, había relegado a los genios traviesos en su interior que se habían negado a obedecer sus órdenes.
Los genios del mal de espíritu se supone que siguen en prisión casi todo el año, pero en Safar, el segundo mes del calendario lunar islámico, se les permite salir en libertad por un tiempo.
Según otra leyenda, el Arca de Noé se posó en el Sulaiman Takht-i después del diluvio.