Monopolio público

[1]​ La reglamentación estatal prohíbe toda competencia por parte de agentes económicos distintos al Estado.

En muchos países, el sistema postal es dirigido por el Estado y la competencia es prohibida por ley en algunos o todos los servicios.

En los países escandinavos, algunos bienes considerados perjudiciales son distribuidos por medio de un monopolio estatal.

En particular, en Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia, empresas públicas poseen monopolios para la venta de bebidas alcohólicas, casinos y otras instituciones para apuestas también pueden ser monopolizadas.

Asimismo, los sistema de seguridad social, donde el gobierno controla la industria y prohíbe específicamente la competencia, como en Canadá, son monopolios estatales.